La trigésima cumbre climática, COP30, comenzó el 10 de noviembre de 2025 en Belém, Pará, en pleno corazón de la Amazonía. Debido a la complejidad logística para acoger a negociadores, delegaciones y representantes del sector público, empresarial, financiero y de la sociedad civil, la COP se desarrolló de manera descentralizada: una semana previa de debates tuvo lugar en Río de Janeiro, centrada en la sociedad civil, y en São Paulo, que reunió a empresas, inversores y actores financieros.

La CNMV estuvo representada por la consejera Helena Viñes, tanto durante la primera semana de la COP como en la Pre-COP.

Evento organizado por la CNMV en Sao Paulo sobre la interoperabilidad de taxonomías

La CNMV, en colaboración con sus homólogos brasileños –la Comisión de Valores Mobiliarios (CVM)– y el Instituto Iberoamericano de Mercados de Valores (IIMV), organizó un evento de alto nivel el 7 de noviembre en la sede de la bolsa de São Paulo (B3), previo al inicio de la COP30. El encuentro fue acogido y auspiciado por B3.

El objetivo central fue presentar los nuevos Principios de Interoperabilidad de Taxonomías, impulsados por la presidencia brasileña de la COP. Estos principios se han desarrollado en colaboración con el Grupo de Trabajo sobre Política de Cero Emisiones Netas (Taskforce on Net Zero Policy), el PRI (Principios para la Inversión Responsable), la UNEP FI y la Climate Bonds Initiative.

El acto fue inaugurado por Otto Lobo, presidente interino de la CVM, y contó con la presencia de altas autoridades del Ministerio brasileño de Hacienda y Finanzas. También intervino la consejera de la CNMV, Helena Viñes, así como representantes internacionales destacados, desde China (el fundador del Instituto de Finanzas y Sostenibilidad) hasta Australia (miembros del Instituto de Finanzas Sostenibles). El evento también incluyó a CAF, que apoya el desarrollo de marcos taxonómicos en América Latina, con la perspectiva de construir un marco común latinoamericano, similar al que impulsa el Banco Africano de Desarrollo para África.

El evento contó con un panel específico sobre movilización de financiación mediante taxonomías, con la participación de grandes entidades financieras como JPMorgan Chase, BNP Paribas, UBS y otros actores globales, que destacaron el lanzamiento de productos financieros basados en la taxonomía. Asimismo, se desarrolló un bloque dedicado a la regulación prudencial, con la participación del Banco Central de Brasil y del Banco Central Europeo, reforzando la necesidad de integrar los riesgos climáticos y las taxonomías en los marcos regulatorios de los supervisores bancarios.

Desarrollo de taxonomías

Durante la semana financiera y empresarial en São Paulo, la consejera Viñes participó en otros dos eventos dedicados al desarrollo de taxonomías y su interoperabilidad. En la COP, la presidencia brasileña ha retomado la hoja de ruta sobre taxonomías iniciada en la COP anterior por Azerbaiyán y liderada por su banco central. Este año se busca su reconocimiento oficial como herramienta clave para movilizar flujos de capital hacia inversiones sostenibles y de transición, así como promover la interoperabilidad de las taxonomías verdes.

El evento en São Paulo evidencia el compromiso creciente de los reguladores con la taxonomía como instrumento para canalizar inversiones sostenibles y favorecer una alineación regulatoria entre jurisdicciones, así como la colaboración creciente entre supervisores iberoamericanos y de otros continentes, en la que la CNMV desempeña un papel destacado. Con la COP30 en curso, la cooperación institucional entre Brasil y España se consolida como un ejemplo relevante de colaboración regulatoria en finanzas sostenibles.

Conferencia Anual del PRI

En São Paulo, durante el día dedicado a políticas públicas de la Conferencia Anual de PRI, dedicada a finanzas sostenibles y financiación de la transición, Viñes ofreció el discurso inaugural, alertando sobre dos certezas que marcarán nuestro futuro climático: el rebasamiento temporal del objetivo 1,5 °C del Acuerdo de París, cuyo impacto dependerá de nuestra capacidad para limitar su duración e intensidad; y la creciente reacción basada en desinformación y polarización contra la acción climática, que amenaza los avances ambientales, los fundamentos democráticos y la estabilidad financiera.

El aumento de 1,5 °C subraya la relevancia de la remoción de carbono y los créditos asociados, que, además de mitigar emisiones residuales en los sectores “difíciles de descarbonizar”, son esenciales para mantener los objetivos del Acuerdo de París al final de siglo. Sobre los mercados de carbono, la consejera Viñes intervino en un panel plenario, destacando los avances del G20 en su regulación. La PRI cuenta con más de 6.000 miembros, que gestionan más de 120 billones de dólares en activos, evidenciando su influencia en la transición financiera global.

Viñes presentó el nuevo informe del Grupo de Trabajo sobre Políticas de Cero Emisiones Netas, continuación del Grupo de Expertos de Alto Nivel del Secretario General de Naciones Unidas sobre compromisos de cero emisiones netas, que ella preside. El informe anual del grupo, entregado al Secretario General de Naciones Unidas en cada COP, evalúa el progreso de la última década y del último año, profundizando en políticas públicas para la transición: planificación financiera, inversiones en activos fijos, prevención de la retención de carbono en la inversión, regulación y negociación de créditos de carbono, políticas de adaptación y resiliencia, cabildeo corporativo y mecanismos de rendición de cuentas.

El informe se presentó en la COP30, en el Pabellón Español y en el del Pacto Mundial de Naciones Unidas, antes de ser entregado al Secretario General en Nueva York. Contó con la presencia del Asesor Especial del Secretario General en Cambio Climático, Selwin Hart, y miembros del consejo y del Grupo de Trabajo. Entre sus hallazgos: las regulaciones de cero emisiones netas diseñadas para empresas e instituciones financieras en el G20 se han triplicado desde 2020; más del 60 % del PIB mundial está cubierto por estándares de divulgación alineados o compatibles con el Consejo de Normas Internacionales de Sostenibilidad (ISSB), como los Estándares Europeos de Información sobre Sostenibilidad (ESRS); y el 65 % de las jurisdicciones cuenta con taxonomías o las está desarrollando. Además, 14 jurisdicciones del G20 tienen una o más medidas regulatorias que requieran la publicación o adopción de objetivos de reducción de emisiones y 13 respecto a planes de transición.

A pesar del progreso, tanto en regulación prudencial, mercados de carbono, tasas de carbono, políticas de suministro público verde o gobernanza climática, Viñes subrayó que un rebasamiento temporal de 1,5 °C exige acción normativa acelerada y coordinada, marcos integrados e interoperables y mayor multilateralismo. Durante la COP, organizó y participó en cuatro eventos sobre las distintas secciones del informe en el Pabellón Español, además de intervenir en el evento de Alto Nivel de Naciones Unidas y presentaciones en otros pabellones, incluidos el australiano.

El 15 de noviembre debatió los resultados del informe con representantes de la Comisión Europea, el Banco Central de Brasil, el Gobierno de Singapur y la OCDE. La semana concluyó con una entrevista al senador de EE. UU. por Rhode Island, Sheldon Whitehouse, quien destacó la creciente conciencia de la sociedad estadounidense sobre el cambio climático, los avances en mercados de carbono pese a la resistencia de la administración federal actual y la influencia nociva del lobby petrolero y gasístico, la urgencia de reducir emisiones de metano y el papel de la tecnología digital en este proceso. Por último, recordó cómo la ciencia predijo hace más de 50 años los efectos del calentamiento global que hoy vivimos.

Puedes ampliar la información en la web de la CNMV.